jueves, 23 de septiembre de 2010
Buzescu, objetivo prioritario
Sabido es mi deseo de visitar Rumanía, además de Bucarest, ciudad que me interesa enormemente no tengo que decir que Transilvania es priority target para servidora.... otra de las delicatessen que ansío paladear es Buzescu. Adoro el feísmo y lo Kitch, y en esta ciudad hay un auténtico desparrame.
Situada a 100 km al suroeste de Bucarest está construida por gitanos ricos, gente que se ha hecho de oro con el desmantelamiento del antiguo regimen, caldereros, chatarreros y otras hierbas. Han erigido un compendio de edificios palaciegos de espantoo gusto, donde el marmol, la baldosa, el hormigón y el terrazo aúnan esfuerzos en mixtura imposible. Colores pastel, tejados dorados, fachadas perladas que hacen casi un millar de "chaletes". Edificios con cúpulas, algunos de ellos con una estrella de Mercedes en lo más alto como símbolo de riqueza y "distinción". Murales, frescos, flores de plástico, mármoles malvas todo un homenaje al feísmo.
A sus habitantes les importa un bledo la opinión de los pedantes y adalides del "buen gusto". Ellos consideran que sus construcciones son pura fantasía y les gusta vivir en ellas.
Según he leído, hay una palacio que emula directamente el tribunal supremo de Bucarest, porque su propietario ganó un juicio en dicho edificio y quiso construirse su casa a imagen y semejanza del edificio donde había ganado el litigio.
"El fotógrafo rumano Iosif Király, creador del proyecto Tinseltown, está convencido de que la población gitana que vive en la localidad de Buzescu «están redefiniendo su identidad». Pero ellos no lo saben y además no parece importarles demasiado. Mariana Celac considera que «su estilo es como una improvisación en música». A su juicio, «la libertad se pierde cuando intentamos encontrar normas e instituciones».Una horterada y una ampulosidad ficticia que les permite olvidarse de la miseria y marginación que han vivido durante años y que muchos de sus familiares aún sufren. Es algo así como una pantalla para aislarse de situaciones ahora ajenas y que no quieren que su memoria recupere."
Hay que visitar Buzescu.
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