Grand Finale a un fin de año contrarreloj

El día de hoy es de esos que no se olvidan con facilidad, qué locura!

Todo empieza el jueves cuando me dicen "tienes dinero disponible??"... dinero? para qué? jaja... tras años de búsqueda y espera de una Ibanez Iceman del 95 me avisa este amigo kissiano del alma que hay un tipo en MI CIUDAD que por carambolas de la vida ha puesto a la venta en e-bay la mítica guitarra, en perfecto estado, con su caja oficial, a un precio muy bueno, muy bueno.

Envío de mails sin respuesta esa noche. Al día siguiente madrugando a trabajar, fin de año pero sin cuartel en el curro, stress, a la salida del curro, sin haber comido ni un almendra cojo el AVE a Barcelona en búsqueda de mi hijo que me espera junto a su mamá en la Estación de Sants.... llego a Sants, toco chufa, cojo al crack con sus bártulos y embarco en AVE de vuelta, a Zaragoza de nuevo.... me llama el dueño de la guitarra, que vence mañana en ebay y tiene varias ofertas, le digo que soy de su ciudad y que si se enrolla pasará la Nochevieja con buen cash en el bolsillo.... llegamos a un acuerdo si nos vemos antes de las 19.00.... llego a Zaragoza a las 17,30.... cojo bus a casa, dejo a mi hijo, al cajero en busca de los dorados euros, con ellos en la buchaca rumbo al otro extremo de la ciudad y, de repente, oh sorpresa, una jodida carrera popular en el centro, todo mi barrio bloqueado!!!!, el tiempo corre y el sueño se esfuma, hablo con unos municipales y apartan el coche que bloquea mi bocacalle, 18,30.... consigo salir.... acelerando en la atiborrada ciudad, atravieso las Delicias y aparco en segunda fila, veo al tipo, Paco, un punk-rocker simpático, guitarra de Los Lügers según me dice.... vamos a su casa, veo la joya de la corona, cual traficante de coca cierro el acuerdo y meto la Ibanez en la parte de atrás del coche.... me llaman algunos de mis mejores amigos de toda la vida..."una caña???".... aparco y guitarra en mano me acerco al garito concertado.... y de ahí es esta foto.... teníamos que posar con la guitarra para perpetuar unos de los días más contrarreloj de los últimos años.... tras ello vuelta a casa, coche de nuevo y rumbo a 15 km de Zaragoza a celebrar la nochevieja....

Tras la cena, mientras la familia reía y hablaba, recostado en un sillón se me iban cerrando los ojos, agotado de cojones pero con una sonrisa de oreja a oreja, casi 20 años detrás de esta guitarra, ahora a darle cobijo como merece.