jueves, 20 de octubre de 2011
Viejo General Sueiro
Guardo esta bonita y pésima instantánea desde siempre. Es General Sueiro, cuando vivíamos allá y la zona, hoy puro centro de la ciudad, era uno de los barrios de casas clase media para matimonios jóvenes con nenes pequeños. En esa calle vivimos nuestros primeros años, y en esa manzana compartimos vecindario gente estupenda, como Luis, Domingo, Chino, Tie, y otros. Al final de la calle, donde hoy aparece el amplio Camino de las Torres, había un extrecho caminejo, aquel viejo y querido árbol que fue talado con las obras, la acequia. hoy sepultada, y viejas instalaciones de antiguas pequeñas fábricas y algún taller.
Ir al colegio era una sinfonía de amigos, juegos, el olor especial de la acequia, mucha niebla y 3 minutos de recorrido al patio.
... Y ese aparcamiento en la entrada del colegio, con tres filas de coches sobre el polvoriento suelo. Y ese patio frontal lleno de arbolillos que teníais y que yo veía desde la ventana de mi salón. Recuerdo, recuerdo eso. De aquella épopca uno de mis recuerdos más vivos es volver de entrenar de la piscina, atravesando la ciudad envuelta en la niebla de noviembre a las 10 de la noche, ni un alma por la calle, un frío que pela, límite de visión a 2 metros por falta de iluminación y mis pasos retumbando por el paseo de las Damas. 0 coches. 0 entes vivos. Imaginación a 1 millón de kilómetros de esta dimensión...
ResponderEliminarGracias por la instantánea Anto.
ResponderEliminarImpagable.
Qué de happy memories.....
Seguimos para bingo.
Un abrazo.
KrissKat
ostias, el circulo de lectores, a que sí??, la acequia sigue pasando por ahí, y desde mi cocina se ve a la altura de ruiseñores, entre escolapias y el grupo salduba!!!
ResponderEliminarmuy buena la foto.
Muy buena, muy buena... esa acequia fue uno de mis terrores infantiles, además me atraía hipnóticamente. Tampoco ayudaba mi abuela, que me pegaba tirones de la mano y me decía que en ella se había ahogado un niño (nunca sabré si era cierto). Yo vivía aún más cerca del colegio, en Bolonia casi en la esquina con la plaza. El mundo se acababa en Agustinos, detrás del colegio, campos, y manadas de perros salvajes (eso decíamos, al menos)
ResponderEliminarSensaciones queridas y entrañables Iván, Tie, Héctor Jesús.... recuerdos inolvidables y espacios truculentos.... cierto lo de Jesús, tras el colegio estaba la nada envuelta en niebla, campos y tierra... lugares jamás explorados.... el Círculo de Lectores con esos juegos de mesa deseados, La Caza entre ellos.... los Saz en el 40, los Ayala en el 38, Hierro, en el 42, Aused en el 50, Torrojos, Torrado,... grandes amigos.... recuerdos mágicos de una época feliz y dorada.....
ResponderEliminarPor no hablar del excelso taller de coches "Freco" que flanqueaba el portal de mi casa, siempre lleno de grasa y coches siderales.... remember kat?
ResponderEliminarQué si remember FRECO, mi padre ha llevado toda su vida los SEAT y PEUGEOT -se pasó a la firma a primeros de los 80´s y ya no se bajó de la burra francesa- a ese ..taller.
ResponderEliminarLa de perras que se habrá dejado con el amigo Agustín. Con el jefe de mecánicos, Sebastián, quien desde hace tres-cuatro años que cerraran FRECO trabaja en otro taller cerca de mi casa, donde mi hermano Santiago aún lleva su coche. Y las sigue gastando.
FRECO a un lado y SAVISA -letrero rojo- al otro (nunca supimos a qué carajo se dedicaban estos últimos, en una conversación reciente mi padre decía que a instalaciones de aire acondicionado....).
Qué decir de ese camino. ese árbol que no recordaba. Puritito árbol del ahorcado.
Abrazos brodel.
KrissKat
Gran Freco, ese olor a anticongelante, ese grasa negra..... ese Savisa CIA, ese Círculo de Lectores.... ese Green.... abrazos Kat
ResponderEliminarA la izquierda de la fotografía estaba la Casa de Valencia. Cuando tiraron el edificio del fondo años después desde ese solar tiraban los fuegos artificiales durante las Fiestas del Pilar. En el Camino Las Torres se solían ubicar las ferias, que eran todo explanadas y acequias. Y como no recordar la cafetería Castillo, la discoteca Green...
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