domingo, 24 de marzo de 2013

Garage Scalextric

He estado revisando algún cajón a ver que tal estaba parte de la escudería Scalextric, y la verdad es que pasan los años y siguen luciendo estupendos. El Brabhman Alfa Romeo siempre fue un coche muy bonito, quizás algo frio de conducción, nada que ver con el formidable Ferrari B3F1, yo creo que el mejor coche que he conducido en slot (de los clásicos), por fiabilidad y potencia, gran aerodinámica y preciosa carrocería. El Camaro azul lo compré por impulso, está en otra dimensión y da un gran resultado en pista, además de su gran clase. El Lancia Stratos lo encontré en un rastro así, pintado en rojo mate???, le añadí un extraño motor de algún coche para darle un punto macarra, jamás lo probé en pista. Mítico Ford Fiesta "Piojez", falto de faro trasero y bregado en mas de mil vueltas... ganador nato, es casi imposible que se salga de la pista puesto a full de motor, es todo un seguro de vida. El precioso Porsche azul es otra adquisición de rastro que ha pasado directamente al garage, un precioso Porsche vintage, sobrio de decoración pero con unas llantas que apabullan. El Porsche rojo ya es otro cantar, este lo compré para poder mirar a la cara a mis amigos en alguna de las carreras que montan.... yo no podía acudir con una escudería de los 70 y compré este sobrio Porsche para poder competir en este siglo... resultado aplastante, motor muy poderoso y se agarra como una lapa. El SEAT 124 sport fue un regalo querido que nunca salió de la caja, da casi hasta pena ensuciar sus escobillas. El Sigma es un coche fantástico, muy bello, pero recordemos su desastrosa adherencia en curvas y el culeo insufrible, un coche para fardar pero NO para ganar. Y finalmente, uno de mis preferidos, el Tyrrell Ford amarillo, una auténtica bala y que conservo en pésimo estado (era muy delicado). En la próxima feria que encuentre pienso comprar unos repuesto originales para darle brillo y presencia. Aún queda alguno más en boxes, lo dejamos para otra ocasión.
























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