Paseo tranquilo y flojo el de este fin de semana. Será porque madrugué, será porque no estaba muy receptivo y algo griposo, pero mi radar no estuvo a la altura. Aun con todo vi estas cuatro piezas que me parecieron muy divertidas. Bonita chapa de cerveza con cierto glamour, un bonito libro-decálogo sobre cómo hacer vermús en condiciones, un precioso minicalendario de la liga de fútbol, de esos que por arte de magia, y moviendo el cartoncillo, te mostraban toda la liga del año.... y, finalmente, la creme de la creme.... una caja de cerillas con el gran ISMAEL, de la Banda del Mirlitón.... Recuerdo que cuando era chaval este señor y sus secuaces provocaban mi espanto instantáneo en cuanto interrumpían cualquier dibujo animado o programa televisivo de interés y aparecían cantando cancioncillas folclóricas terribles sin interés.... a pesar de todo, sería por la repetición, se les cogía hasta cariño.
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