Ya puse en su momento una foto de este bonito comercio de Zaragoza. Hoy he querido visitarlo y hablar con su amable propietario que me ha tratado fenomenal. Electricidad Baltanás es una tienda de repuestos eléctricos que permanece con la misma estructura interna y externa desde su inauguración en 1932. Está escondida en una preciosa calle, como es Espoz y Mina, una de las de más solera e historia de la ciudad. Ha permanecido abierta desde entonces.
He podido saludar a Ricardo Baltanás y a Isabel Blanco, que me han contado cosas del comercio. Ricardo ya está en edad de haberse jubilado, atiende la tienda por cariño a su profesión y para distraerse, lleva 50 años tras el pequeño mostrador. La tienda conserva su mobiliario, cajoneras, estanterías, suelo y disposición original, aunque repintada. Tiene una bonitas cortinas, muy de los 50, y una estupenda reja de aquellas corredizas tan interesantes. La estructura de la tienda es de entonces, hecha con categoría y sabor. Espero que Ricardo mantenga el comercio un buen tiempo aún, de estas cosas quedan pocas en la ciudad, aunque es ley de vida que, al ser un negocio familiar y no haber continuación, Electricidad Baltanás recorre sus últimos años.
Me ha contado (se puede ver desde la calle) que en el edificio frente a la tienda cayó una bomba (se ve una placa conmemorativa) que rebotó y fue a parar a la casa donde está la tienda, hundiéndola varios metros. Son bonitas historias que se conocen hablando con estos buenos comerciantes aragoneses que llevan sus históricos espacios ya no sólo por ganarse la vida, sino por placer y amor a su profesión.
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