Y del paraíso, al infierno en 12 kilómetros. Hacía mucho tiempo que quería conocer este lugar, la "Casa de Dios" de Julio Basanta, en Épila. Está escondida, ubicada en un barrio alejado del pueblo llamado el Cabezo Blanco.... la llegada no puede ser peor, subiendo por un camino de grava... al pasar por unas naves una jauría de agresivos perros se lanzan contra el coche con claro deseo de devorar a sus pasajeros.... vaya prolegómeno!. Al subir, el estupor le deja a uno sin habla. Las imágenes hablan por sí solas.
Según he leído, este señor primero tuvo su "finca" tematizada con el tema western (pongo una foto de una caseta con un sol y un cáctus, único recuerdo de esta etapa) pero más adelante, la temática evoluciona hacia.... ésto. Día nubloso, silencio sepulcral, viento helado y temible lugar.... cruces, diablos, ahorcados, sangre, svásticas y extraños mensajes.
El vecino salió cuando casi nos íbamos, le saludé amablemente.... él me miró como diciendo "Maldito lugar y malditos visitantes", me imagino que no tiene que ser fácil colindar tu finca con un espacio así.
Impresionante el trabajo de este hombre.
ResponderEliminarCómo plasma su dolor y su indignación.
Gracias.
Ciertamente..... Basanta falleció ya y no se en qué situación se encuentra su casa ahora.... es muy interesante esa deriva desde el old west hasta el terror bizarro y macabro... un saludo
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