Una curiosa pista de aterrizaje, ubicada en Cogullada y que poca gente conoce. Está dentro de un recinto privado y se nota que nadie la ha usado en años, los hierbajos y los baches impiden un uso "serio" en la actualidad. La rumorología cuenta que era la que utilizaba el Marqués de Villaverde, yerno de Franco y reputado "bon vivant" para desplazarse sin tapujos a la capital zaragozana y poder alojarse con sigilo.
El Marqués, un cuestionado cirujano, quiso pasar a la historia y el régimen quiso utilizar su figura como "uno de los mejores cardiólogos del mundo", absoluta falsedad, de hecho realizó el primer trasplante de corazón en España con un desastroso resultado. Colocado en numerosos hospitales patrios de donde sacaba buenos recursos y nunca aparecía, también pasó a la historia por estar metido en varios negocietes rusientes (Vespa) y por su vida algo disoluta.
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