miércoles, 15 de febrero de 2017

JULIÁN CAUSAPIÉ, maestro artesano taxidermista

Le debía una visita a este maestro artesano zaragozano. Hace un tiempo hice una foto de su local, fue muy amable contestándome al blog. Me extrañó el opaco escaparate y es que el buen artesano tiene sus razones. Un día de Navidad unos desaprensivos destrozaron su escaparate donde mostraba sus ricos dioramas (exquisitos diría) que emulan los habitats de las especies que el diseca.

Trabajos dignos de museo que, tras el ataque de los vándalos, quedaron expuestos solo para algún medio de comunicación, clientes y personas que hemos tenido la suerte de visitar su tienda. Dentro, un local lleno de historia, sabor, y más de 500 animales expuestos. Impresionantes esas vitrinas de flamencos, perdices, serpientes.... portentosas las especies de pajarillos dignas de maestro relojero. 

Muy didáctica la explicación del especialista, mostrando cómo se trabaja honestamente la pieza, utilizando el cráneo y esqueleto auténtico y real del animal, luego rellenando en una labor titánica, moldeando la personalidad y la morfología del animal. Me cuenta como se ha generalizado el uso de una especie de "maniquíes" que simplemente luego se "forran" con la piel del animal, haciendo que los trofeos acaben estandarizándose y perdiendo su personalidad. Julián es vieja escuela, nada de maniquíes, y en su fantástico habitáculo de trabajo pueden verse varias piezas preparadas para el montaje y su resultado, sinceramente, es fascinante.

Brutales las cabezas de toro, impresionante el ciervo, entrañable el león Willy, por lo visto es el que estuvo en el Parque Bruil, y Julián lo conoció personalmente.

Un artesano único en la ciudad que merece visita obligada, un lugar especial y diferente. Una persona que ama la naturaleza y que guarda un legado de trabajos únicos dignos de un buen museo institucional y que, ojalá, puedan acabar exponiéndose en un lugar a la altura, pero como me dice en agradable conversación; "dicen que no hay dinero". Así que nada, no hay dinero. En otros países del mundo la taxidermia es una moda muy cotizada. Si alguno de esos millonarios viera los trabajos de Julián se quedaría más que sorprendido.









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