No es el rastro de los sábados al que no pude acudir, pero cada mes se hace un rastro muy auténtico en Da Fabrik, un espacio industrial en el barrio de Altona (Hamburgo), un sitio genial. Son puestos de la gente particular, a precios ridículos, rondando todo los 50 céntimos o el euro. Conseguí un fabuloso libro a un precio vergonzante con gran regocijo de la vendedora.
Fantástico, seguro que tenían material naval, al ser ciudad de gran tradición portuaria.
ResponderEliminarEste rastro no es bueno, ese es el sábado y no llegué, este es más de particulares y sale alguna perla. Sí que vi muchas tiendas de efectos navales, algunas de ellas deliciosas, y me compré una bonita campana de barco para casa. Abrazos
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