Como digo en el texto, seguro que tu habrás cambiado o colocado novedades que te encantan en tus estanterías... según el momento o la novedad.Agradecido por hacerte eco...
Auténtica joya ese barco pesquero de Playmobil. Excepcional pieza considerada por muchos aficionados de la marca como uno de sus mejores sets. Se hizo a escala de una embarcación holandesa real. Completamente practicable, se comercializó para que los niños navegaran el barco y los detalles son de muchísima calidad. El amigo Akela denota un gusto exquisito al incluirla en su colección.
Es una verdadera pena cómo se ha degradado paulatinamente la marca tras la jubilación de Beck en el 2000. Hoy a duras penas se reconoce un atisbo de lo que fue su época dorada.
Es de agradecer Langsdorff tu entusiasmo y puntualización por este barco pesquero que es una maravilla, a falta del motor que lo haga navegar. Lo cierto es que quería tener una muestra de Playmobil, ya que no es de mí generación, pero tenia la necesidad de tener algo que valiera la pena. Abrazo a los dos.
Si Langsdorff lo ensalza, es que es altamente ensalzable. Sin ser conocedor ni admirador del mundo Playmobil no haría ascos a tan civil y limpia pieza. Además, que nuestro amigo Langsdorff hundiera su propio barco dice mucho sobre su honorable sentido del cabotaje. Abrazos
Como digo en el texto, seguro que tu habrás cambiado o colocado novedades que te encantan en tus estanterías... según el momento o la novedad.Agradecido por hacerte eco...
ResponderEliminarAuténtica joya ese barco pesquero de Playmobil. Excepcional pieza considerada por muchos aficionados de la marca como uno de sus mejores sets. Se hizo a escala de una embarcación holandesa real. Completamente practicable, se comercializó para que los niños navegaran el barco y los detalles son de muchísima calidad. El amigo Akela denota un gusto exquisito al incluirla en su colección.
ResponderEliminarEs una verdadera pena cómo se ha degradado paulatinamente la marca tras la jubilación de Beck en el 2000. Hoy a duras penas se reconoce un atisbo de lo que fue su época dorada.
Gracias a los dos por vuestras valiosas aportaciones, un lujo teneros cerca, abrazo fuerte
ResponderEliminarEs de agradecer Langsdorff tu entusiasmo y puntualización por este barco pesquero que es una maravilla, a falta del motor que lo haga navegar. Lo cierto es que quería tener una muestra de Playmobil, ya que no es de mí generación, pero tenia la necesidad de tener algo que valiera la pena. Abrazo a los dos.
ResponderEliminarSi Langsdorff lo ensalza, es que es altamente ensalzable. Sin ser conocedor ni admirador del mundo Playmobil no haría ascos a tan civil y limpia pieza. Además, que nuestro amigo Langsdorff hundiera su propio barco dice mucho sobre su honorable sentido del cabotaje. Abrazos
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