COGEMOS EL ÚLTIMO AUTOBÚS

Me gusta es foto de Paul Stanley (Kiss) en el típico autobús de gira, cuando las rock stars todavía se dejaban llevar en sencillos autobuses de aquí para allá. Este fin de semana veremos a los enmascarados de nuevo y por última vez en el formato de Kiss clásico que tanto nos gusta, es ley de vida, más de 70 años con 20 kilos de tonterías encima subiendo y bajando rampas no es algo saludable, sí encomiable.

Este años se cumplen 42 años acompañando a los neoyorquinos, que se han convertido en parte de nuestras vidas, una parte emocionante, simpática, divertida, bonita, compartida y llena de satisfacción.... acompañarles en su recorrido es como cuando te hablan de un primo lejano, los conoces tan bien que esbozas una sonrisa cuando te llegan noticias de ellos sabiendo que no son nada tuyo pero sí un pedacito de tu cultura pop.

Fuimos unos fans locos en aquellos 80, con 14 años todo es una locura y supimos disfrutarlos con intensidad cuando conseguir imágenes, discos o verlos en directo era prácticamente imposible, lo que los hizo aún más apetecibles.

Los vimos en su segundo concierto desenmascarados, en su peor momento de fama, y quizás uno de sus mejores momentos de forma musical, en 1983, en aquel fabuloso tour de 1997 con la vuelta del maquillaje y los componentes clásicos, en el show Psycho Circus del 98, en el fabuloso meet & greet del 2008, en las giras de 2010, 2013 y 2015, pudimos fascinarnos en el Kiss Kruise de 2016, en el nuevo tour de 2018, en otra fabulosa experiencia norteamericana en 2019 y, ahora, tras años en la mano con un ticket de 2020, en el concierto de la gira de despedida, casi 50 años después de calzarse las botarras de plataforma.

Para ver tantas veces a una banda cómo ésta, algo tienen que tener y ofrecer, y es una experiencia en directo que pocas banda dan. Repiten las canciones, sí, van sobre seguro, también, nos cuentan en castellano las mismas anécdotas, de acuerdo, pero son KISS y los vamos a echar mucho de menos cuando no estén, así que con nuestro viejo ticket en la mano, con agradecimiento, nos subimos al autobús de este último tour.... y si no lo es, pues alegría y e iemos de nuevo a la taquilla.