Una excelente muestra instalada con primor en un lugar que merece ser visitado, el espacio San Telmo de San Sebastián. Reúne arte y proyectos científicos en relación al cerebro, el complejo y fascinante órgano. A través de la muestra se entra en territorios como la comprensión de la experiencia consciente y cómo el arte, la filosofía o la propia ciencia han reflexionado y representado el cerebro a lo largo de la historia.
Me han intersado especialmente, además de los ejercicios de como puede distorsionarse la experiencia de la realidad, la instalación de imágenes, desasosegantes, generadas mediante el algoritmo Stylegan2 con recursos del Museo del Prado, un trabajo llamado Déja-vu realizado por Joan Fontcuberta y Pilar Rosado.
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