Muchas veces, muchas veces, pequeños acontecimientos se convierten en una gran celebración. Ayer, un poco de sorpresa, nos presentamos en un pequeño local cerca del Parque Grande, El Corazón Verde, a ver a una excelente banda de blues / R&B / swing, The Groovy Four. Excelentes.
40 personas ante los miles que convoca cualquier trapero de éstos, mundo loco el que vivimos. Martín Burguez (Uruguay) a la voz y la guitarra, enorme el amigo, Arnaud Desprez (Francia) al saxo, Pascal Mucci (Francia) a la batería y Oriol Fontanals el contrabajo. Qué buen bolo vive Dios. Llevan vuelo los amigos, pero el proyecto es nuevo, y excelente, un homenaje a los años 40 y 50, pasando por el swing y soltando tres piezas de blues negro de las que quitan el hipo.
Curtidos, especiales y llenos de talento, nos pusieron a todos en pié en un concierto de los de silla, buen vino y patatas crujientes, pero esta gente levanta a un muerto. Me encantó el detalle de un espectador que, durante el concierto pintó una acuarela de la banda, que éstos recibieron con sorpresa y cariño. En la foto la maleta de viaje de cds de la banda con la acuarelita. El disco es un bálsamo de calidad, ellos cercanos y sencillos. Un magnífico concierto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario