Sabido es mi amor y veneración por nuestra querida Escuela Bruguera, factoría de TBOs creativos, excelentes, maratonianos, formidables.
Termino de nuevo mi ojeo y jugueteo con esta fantástica edición "Cuando los cómics se llamaban tebeos", escrita por Antoni Guiral y editada por "El Jueves Ediciones" en 2004. Un libro enciclopédico y virtuoso, que te acerca y detalla a los autores y sus creaciones, que configuran parte importante de la cultura infantil de millones de españoles. Logotipos, personajes, primeras viñetas, series olvidadas, creadores grises en el recuerdo, que delicia! La Escuela Bruguera se estudiará en las Universidades siempre, espero, porque será como los jeroglíficos egipcios o las pinturas rupestres, un diario, un retrato de la España de posguerra, donde los extraños eufemismos, los palabros imposibles, el hambre y las penurias del español de clase media se cuentan con gracia y mala leche...
360 páginas magníficas, imperdible documento para un amante de la historieta.
Se ve como algo sencillamente maravillos este libro... Quien pudiera tenerlo...
ResponderEliminarYa desde la portada me atrapa.
Marcelo
en marzo voy a Buenos Aires, algo tendre que llevarte Marce, jajajajaj
ResponderEliminarDí que sí. Con estos tebeos crecí yo y aún me sigo comprando algún Mortadelo y Filemón. Recuerdo cuando compraba el DDT, el Mortadelo, el Tío Vivo. Inolvidables también Anacleto agente secreto, Rigoberto Picaporte solterón de mucho porte, etc.
ResponderEliminarAmigo, estás ante el seguidor número uno de la Escuela Bruguera.... grandes maestros!
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