Mein privaten und pequeñen cruzaden

Nuestro pequeño e insensato expresidente sigue dando una imagen pésima de nuestro país allá dónde va, tal es así que ni tan siquiera los medios conservadores ya lo defienden, obviándolo en el caso de los más ultras y criticándolo los más tibios.

La política es la política y no hay villanos ni héroes, tan sólo políticos, pero prefiero un político consensuador e inteligente como Barack Obama, que, poco a poco, con críticas pero con educación y una hoja de ruta marcada intenta suavizar, acercar e intentar desenquistar problemas trágicos como la guerra impenitente que se vive en la frontera israelí, por mucho que les joda a los fabricantes de armas norteamericanos o a los lobbys judíos.

Aznarín, ese pequeño Napoleoncillo patrio que tenemos, aburrido inculto, ultraderechista y, ante todo, tooooonto, muy tonto, se planta hoy en Jerusalén, justo cuando en Washington se produce el encuentro entre los dos frentes y lo único que se le ocurre es poner a parir a Obama... continuando su cruzada "antimoros" iniciada hace unos días en Melilla. Jose Mari, con su chamarra caqui, con mirada de furtivo, pelo grasiento, alerta, como Stewart Granger armado con fusil destrozarinocerontes tras una loma, presto, con su cruz tatuada en el pecho... atento a la próxima invasión de la media luna, reencarnando el espíritu de los Reyes Católicos, nos recuerda los mejores tebeos del Guerrero del Antifaz o del Capitán Trueno, esos héroes hispánicos tan majos que rebanaban turbantes como quien unta nocilla.

Nunca pisó Melilla mientras fue Jefe de Estado (Dios, que mancha en la historia de España), y no se le hubiera ocurrido en la puta vida poner a caldo al Presidente de USA, fuera de la tendencia que fuera, si estuviera en Moncloa. Pero el pequeño renacuajo, reencarnando un pequeño Torquemada con bigote de Adolf, pero menos esquizofrénico y mucho más torpe intelectualmente si cabe, sigue paseándose por el ámbito internacional jodiendo la imagen del país, jodiendo a nuestro país y abriendo el cubo de la basura destapando los olores más pútridos y rancios de una España que todos queremos olvidar.

Paso de Pajines, Zapateros, Rajoyes, Camps, Moratinos, de todos ellos, pero no paso de mi país ni de su imagen y mucho menos de los pequeños frustrados que esconden, tras su baja autoestima y sus ansias de estadista frustrado, ganas de meter mierda, generar confrontación, fastidiar los intereses de un buen país como es el que tenemos y no ven más lejos que desde su miope, triste, ultrareligiosa, intolerante napia calva de bigotón, fuck off!