LOS TEBEOS.... UNIVERSOS CONTRA LA ENFERMEDAD, EL ABURRIMIENTO Y LA RUTINA

Me encantó esa entrada que hizo HAL sobre los tebeos como gran remedio para cuando cogías una enfermedad de esas que te tenían semanas en cama, como el sarampión o la hepatitis.

Los tebeos tuvieron esa utilidad, por supuesto, y muchas más. Abrirte universos, acompañarte en las tardes o fines de semana cuando, o no había tele, o no podías hacer otra cosa. Te acompañaban en el desayuno, en la merienda y siempre que fuera posible. Te acompañaban antes de dormir y en momentos de enfermedad, siempre en la mesilla dispuestos a ser releídos.

Eran otros tiempos, no tenías todo a tu disposición, sólo una decena de tebeos de diversas colecciones que te abrían a la emoción de descubrir aventuras, conocer libros de aventuras o investigar algo extraño como era Marvel, o Disney. Su relectura era obligada, como con los vinilos, tenías uno, lo usabas mil veces.

He recopilado siete piezas que, en mi caso, fueron pioneras en abrir el melón de los distintos universos. 

VIAJE AL CENTRO DE LA TIERRA. Colección Historia Color Bruguera. La portada ya fue un impacto demoledor, pero  el encontrarte con Julio Verne así, en frío, de chaval, resulta una catársis. Dibujo clásico en una aventura insuperable que te ata para siempre con ese mundo inhóspito que hay dentro de la corteza terrestre y en la cabeza del francés.

MARVEL. DR. MUERTE Y NAMOR. Mi primer tebeo de superhéroes, toda una carambola aleatoria. Pero vaya suerte que fuera esa extraña y terrible batalla entre el Cráneo Rojo, Namor, Dr. Muerte  y un ciego Encapuchado. Encontrarse con esta saga fue una bendición divina.

COLECCIÓN DUMBO. EL SECRETO DE HONDORICA. Insuperables tebeos Dumbo de la factoría Disney. Conocer los universos de Donald, Gilito, Los Apandadores, sus aventuras, Ungenio Tarconi, leído cien mil veces.

ASTÉRIX Y OBÉLIX. EL ADIVINO. Mi primer Astérix, un regalo infantil de cumpleaños, me voló la cabeza esta historia. Leída un millón de veces entre carcajadas y lágrimas de risa. Todavía conserva en su interior migas de pan, manchas de grasa de los bocatas de chorizo y todo tipo de desastres consecuencias de interminables meriendas leyendo una y otra vez esta historia única.

TINTÍN. LA OREJA ROTA. Mi primer Tintín, un regalo de cumpleaños infantil que supuso un salto de nivel hacia el Indiana Jones de nuestra infancia, mucho más interesante que el posterior. La línea clara, los personajes, los vehículos, la delicadeza del ritmo y el diseño, un gran descubrimiento.

MAGOS DEL HUMOR 1. Un lujo de esos que te pasan una vez en la vida. Que te regalen un Magos del Humor fue algo difícil de olvidar. Los universos de Don Pío, Agamenón, Rompetechos, Sacarino o los únicos Mortadelo y Filemón. Incómodo y pesado para un niño, era como leer una enciclopedia llena de diversión.

MORTADELO Y FILEMÓN. Mi primer tebeo de Mortadelo. Estaba enfermo de hepatitis y me pasé un mes en la cama de mis padres tratado como un marqués. Una tarde mi padre me trajo este tebeo, que conservo, es mi primer encuentro con el dúo loco. Leído un trillón de veces, de ahí su lastimoso estado.

PELÍCULAS DISNEY 6. Otro regalo insuperable. Acercamiento al universo de Disney en un tomo del peso de una roca. Inolvidable la historia de Mickey con Robin Hood y el acercamiento a Winnie the pooh.