Tengo un recuerdo muy bueno de este museo ruso. Lo visité en 2007, creo que ahora está renovado y mejorado, una pena, porque su grandeza precisamente radicaba en la decadencia absoluta de sus instalaciones. Una ordenanza de 70 años, que se había montado su quiosco la mar de majo con venta de chucherías, lleno de plantas de su propia cosecha. Una sala de vídeo parecida a un casino de pueblo, con televisón de caja, elevada con flecos, y 16 sillas de todo pelaje, brutal.
Dentro, maravillas. Toberas siderales, cohetes, propulsores, sputniks, una colección fascinante de patchs de expediciones espaciales, tremendos reactores, material lunar y mucho material de astronautas. Os pongo unas poquitas fotos, es una visita obligatoria si vais a la gran ciudad rusa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario