Nos quejamos mucho del rastro, pero todavía más motivo de queja tienen los vendedores. Otro maratón urbano (uno más) bloquea el acceso de vehículos y personas de forma natural a la plaza, pocos puestos, poco público. Pero me imagino que la tarifa municipal es la misma. He pedido precio por una cosa y casi me medio infarto, la inflación llegó también al rastro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario