Había oído hablar de este rastro a un buen amigo de Zaragoza, la verdad es que ya me gustaría tener uno así en mi ciudad. Esta zona alicantina es un lugar de residencia de muchísimas personas venidas de UK, Alemania, Holanda y otros países de Europa. Muchos de ellos acuden al mercadillo buscando cosas interesantes, otros incluso tienen puestos donde venden mercancía traída de sus lugares de origen. Más de dos horas de puesto en puesto y de conversación en conversación. Gracias a César por hacer de anfitrión y por su amabilidad.
2 comentarios:
Interesantísimo, me imagino lo que habrás disfrutado.
Ha sido muy divertido la verdad, abrazo fuerte!
Publicar un comentario