Bueno, un poco decepcionante y frustrante esta exposición, no porque no sea interesante lo que contiene sino porque no corresponde lo que promueve con lo que narra. Hay unas cuantas piezas y curiosas, porque el viaje a la luna siempre es evocador de la fantasía más extrema y estéticamente funciona muy bien. Un cuadro de mandos muy chulo, ese propotipo español de escafandra de astronauta, materiales del día a día de los tripulantes. Pero de nuestro querido Tintín, más allá de unos cuantos materiales en la tienda, 5 dibujos originales, boceto, guión, lápiz, y un entintado, y poco más. Escaso jamón para un bocadillo que parecía más interesante.
Pese a todo merece acercarse, aunque sólo sea para hacerse una foto de astronauta.