Bueno.... los últimos clientes salen del viejo bazar, colocamos las contraventanas, terminamos nuestras últimas charlas, apagamos la estufa de carbón y bajamos unos días la persiana. Ha sido un año intenso, lleno de experiencias, con nuevos amigos en todo el planeta y, como siempre, ganas de intercambiar ideas y saberes. Gracias a todos por pasar por esta humilde almoneda de barrio, punto de encuentro de amantes de los coches, los tebeos, los juguetes, el material de kiosko o los cromos, del cine, del rock, de lo antiguo y de lo nuevo, de la arquitectura o del mobiliario que nos dice algo, de los viajes y de los espacios que merecen la pena conocer.
Queridos clientes, o mejor, amigos, por un gran año venidero. Un nuevo año, que como siempre digo, se prepara lleno de oportunidades, y de cosas que compartir.