Kansas es una de mis bandas preferidas. Después de 56 años de existencia los de Topeka siguen dándome alegrías, transmitiendo excelentes sensaciones y conservando su excelente legado como nadie. Ya creo que quedan solo tres miembros originales y no cuenta en sus filas con el especial y talentoso Steve Walsh, un referente, pero siguen sacando discos maravillosos y recorriendo, casi en solitario, ese camino tan especial que mezcla el AOR, el rock sinfónico, gotas de pasajes progresivos, folk y bonitos riffs y momentos de hard rock. Yo creo que, en esa locura estilística anda su magia, y en sus canciones obviamente, magníficas y sabiamente tocadas por un manojo de artistas virtuosos.
Llegar a Kansas a principios de los 80, para éste que escribe, no fue fácil y sí fruto de una carambola. Tras el encuentro con el hard rock, el heavy metal, el tecono-pop o la new wave, al que añadimos el hair-metal, el glam o el thrash metal, trasegar por Kansas suena extraño.
Pues una carambola. Un amigo, ávido coleccionista de discos y enamorado del tecno-pop, tenía tres discos en vinilo de Kansas, los tres primeros, Kansas, Songs of América y Masque, de portadas alejadísimas de lo que yo escuchaba por aquel entonces. A él le interesaba un single de Visage que yo tenía (y que recuperé) y me ofreció tres discos de Kansas a cambio, un trueque excelente para mi y que me abrió los ojos y los oídos a este tipo de bandas, a los que añadí a Boston, Lynyrd Skynyrd, ZZ-Top o Molly Hatchet. Desde entonces llevo escuchando a Kansas, sin pausas, siempre me suenan actuales, atemporales, con calidad, con eficacia, sin alardes, sin ruido. Nunca han estado en España, como le pasa a bandas como Boston, Chicago, etc.... habrá que hacer un esfuerzo para poder ver lo que queda de los míticos y viejos Kansas.
Esas carambolas no buscadas me han cruzado por el camino con gente como Kansas, Cheap Trick, Frank Zappa, Stryper, Iron Maiden, Metallica o Faith no More. Hay que dar espacio a las carambolas y un espacio y tiempo a esos discos que, por casualidad, se cruzan en tu camino, pueden cambiarte la vida musical.
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