No olvidaré esta ciudad, tampoco a sus amables gentes y las loquísimas noches de viernes y sábado, donde los coches y sus locos conductores, en una especie de American Graffiti con esteroides del siglo XXI, queman rueda con la música a volúmenes imposibles. Capaz de albergar a locas rubias del medio oeste sin ningún pudor a la hora de mostrarse en autobuses customizados como acoger a las familias más agradables y tranquilas disfrutando de un concierto de soul gratuito, compartiendo palomitas y cerveza en un parque. Con un corpus universitario y sanitario muy potente, Nashville se presenta como una ciudad poderosa y con presente…. Renacida y recuperada, llena de vida, de gente y de sonrisas. Desde aquí mi agradecimiento a Bill, a Súper T, al amabilísimo tipo del Capitolio, a las gentes de la destilería, todos encantadores. Ha sido una experiencia excelente y recomiendo vivamente su visita. Recogemos maleta, cogemos un bus y buscamos un nuevo territorio.
2 comentarios:
Una ciudad cuasidesconocida para el turista medio pero maravillosa. He estado varias veces y volvería una y otra vez, pero ¡ay, amigo Saz! nos queda un poco a desmano.
Cierto, quizás lo desconocida que es la hace más hermosa, auténtica y vivible, la tendré en mi corazón, abrzos
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