Nunca quise verla porque todo lo que me huele a Warren Beatty lo suelo esquivar, pero tantos ingredientes como música de Ennio Morricone, Harvey Keitel, Joe Mantegna, Ben Kingsley, Annette Benning y un director con altibajos como Levinson pues vaticinaban algo apetitoso.
Además, la historia es apasionante, la fundación de Las Vegas. Como las estructuras de la mafia hacen por crear el nuevo lugar fuera de la ley. Pero vaya pena. Bugsy Siegel fue un asesino de tomo y lomo, sanguinario y terrible.... así como los capos que le rodearon. El Bugsy de Beatty acaba siendo una especie de caradura simpaticón con un punto killer y toda la historia una especie de bonachón cuento de hadas.....hasta Elliott Gould, un actor clásico y bueno de los 70 es una especie de caricatura de sí mismo.
Increíble e indigno ese giro de guión final, indigno de 2.000.000 de dólares.
Es una pena, porque se acerca más al tebeo de Dick Tracy que a Uno de los nuestros.... y ostras, con tanto despliegue podían haberse currado un poco más la calva de Keitel que es digna de Halloween.
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