He encontrado este sensacional vinilo en una vieja tienda de discos de Vicenza a precio casi de robo, no he podido decir no. En 1980 Peter Criss “abandonó” Kiss, dejémoslo ahí. Sacó este disco en solitario que, a mi entender, es de lo mejor que jamás ha hecho, fue un fracaso absoluto. Tal es así que no se editó en CD hasta la reunión de KISS en 1997. Y el disco merece un buen reconocimiento. Un disco tranquilo, intimista, triste y totalmente alejado del sonido de la banda neoyorquina. Una portada formidable, realizada por el magnífico artista lowbrow Todd Schorr y en la que, como anécdota, aparece retratada la entonces pareja de Criss, Debra Jensen, la chica rubia de la izquierda. Nunca puede comprármelo porque no se editó en España y encontrar esta primera edición USA no tiene precio.
La contraportada del mismo es una descarada maniobra de Casablanca de hacer “kissiano” el disco, podría ser perfectamente la contra de uno de los discos solitarios, el Unmasked o el Dynasty. Le pregunté a Dino, el septuagenario dueño de la tienda por material antiguo de KISS y me dijo que eso era un imposible. No sabía el viejo vendedor de discos que tenía esta joya escondida. La tienda, Saxophone, es hija de los 70-80, y en ella, como reza su rótulo, se venden discos, discos compactos y cassettes, además de material de amplificación y viejos fósiles. Dino me pareció un tipo de esos con los que se puede compartir un café.
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