Con medio horita de retraso y tras unos teloneros para olvidar, por fin daba inicio nuestro cuarto encuentro con la banda cristiana Stryper, una de nuestras formaciones preferidas desde sus inicios. La Sala Apolo es una delicia para ver conciertos. Antiguo café cantante, estupenda acústica, muy buena visibilidad y cómodo aforo, todos los alicientes eran perfectos para poder ver a los californianos.
Y salieron con "Soldiers under command" como una apisonadora. En perfectísima forma y con nuevos trajes avispa, adaptados a estos tiempos, chulísimos y bien trabajados. Fueron desgranándose una a una las grandísimas canciones de la banda, como "More than a man", "free", "the way" o "calling on you", algunas nuevas, como el "Peace of mind" de Boston, un pequeño homenaje a Judas Priest... así durante una hora y veinte minutos que, aunque se nos quedó corta nos dejó más que satisfechos. Eché de menos su nuevo éxito "I believe" o "In god we trust" pero lo que dieron, fue de alta calidad.
La banda está en una forma extraordinaria, Michael Sweet enorme, excelente guitarra y cantante modélico, sus poses y trabajo hacen de él uno de los mejores frontmans del hard, inconmensurable. Volvió el bajista de siempre, Gaines, y cómo se nota! Los coros extraordinarios y la energía de su bajo es insustituible, enorme. Ozz Foxx en su línea, con el pelo casi clavado a 1983, jejej, ropa bien trabajada y haciendo de Ozz Foxx pero quizás menos protagonista que en otras ocasiones. Quizás el más apagado fue en este caso Robert Sweet, nos tiene acostumbrados a ser una apisonadora, y aunque empezó como tal fue apagándose según pasaba el concierto, estuvo algo frío....
Para mí, el mejor concierto que les he visto.... ahora sólo les falta ampliar un poquito el tiempo, media horita creo yo, y darle entrada a esos grandísimos temas que dejaron en el tintero. GRANDES STRYPER!
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