Siguiendo la línea de visitar "otra Roma", sabía de la existencia de esta Iglesia, la del Sacro Cuore del Sufragio, al lado del Palacio de Justicia, solitaria y oscura.
Esta Iglesia contiene un extraño y diminuto museo, creado por el Padre Jouet, párroco y fundador del recinto que pensó que era un buen lugar para dedicarlo a las errantes almas del purgatorio, aquellas gentes que ni están en el cielo ni en el infierno, je. Pues el amigo se dedicó a buscar piezas dónde se hubieran grabado "presencias" o acciones de estas almas, sábanas quemadas, libricos con marcas, dedos en maderas.... vamos, un flipe a finales del XVIII. La verdad que todas estas cosas, vistas hoy en día, no dejan de ser casi infantiles y muestran la credulidad e ignorancia de aquellas antiguas generaciones, son efectos de fácil simulación.... pero su disposición, espacio y ubicación en el recinto, infunden respeto.
Una amable ecuatoriana nos explicó las diferentes piezas. En líneas generales son almas del purgatorio que se "muestran" a los mortales y les piden rezos por su alma, así su estancia en tan gris lugar puede quedar reducida. También nos mostró, una cara aparecida en una columna tras el incendio de la iglesia original a finales de XIX... con mucha imaginación puedes verla, pero sobre todo con mucha fe. Un lugar curioso, extraño y solitario que merece la pena visitar.
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