Máquina de Vending de chicles de bola BEAVER

Estoy enormemente contento. Llevo años buscando una máquina expendedora de chicles de bola, creo que como elemento decorativo y como hucha es un concepto maravilloso. Hay muchas máquinas "juguete" por ahí que no me interesan y las máquinas antiguas, americanas o las preciosas de pared españolas, son carísimas y no están a veces en el mejor estado. El otro día paseando por un centro comercial encontré una máquina que reunía todos los condicionantes, estéticos y de calidad, que yo requería. Las máquinas de vending BEAVER están fabricadas en Canadá, son de una estupenda calidad, se ve robustez, metal y materiales dignos, y están excelentemente decoradas, dentro de la sobriedad, con su logomarca, el castor. Tras una serie de rastreos en internet conseguí contactar con un distribuidor español que podía conseguirme una máquina de estas características absolutamente nueva, con su llave y, por descontado, con una buena cantidad de chicles de bola canadienses de calidad sin caducidad. Y, tras una serie de gestiones, ya llegó la estupenda pieza. Mis expectativas no sólo han sido colmadas, sino que sobrepasadas al máximo. La máquina es preciosa, de un tamaño muy adecuado, acepta monedas de euro y funciona con perfección. Está situada en un lugar de honor del salón de mi casa, donde todos los visitantes, además de ser agasajados como merecen, tendrán la posibilidad de comer auténtico chicle de bola norteamericano a un precio más que digno.