Hoy me ha pasado algo especial y que ocurre pocas veces, una sencilla lección de vida de esas que no suelen acontecer en nuestro día a día, en un país como el nuestro y que sueles recibir lejos de él y de quienes menos tienen.
He pasado por una tiendita de Fort Galle y, en la fachada, había una bonita placa de Coca Cola en cartón plastificado.... buscaba una cosa así, con caracteres autóctonos.... el comercio es una tienda regentada por una humilde familia de 7 u 8 miembros.... Intentar explicar al dueño, un anciano, que estaba interesado en comprar la placa de la fachada ha sido todo un reto, no lo ha entendido, pensaba que quería Coca Cola. Al final ha salido la nieta que tampoco lo ha entendido pese a saber un poquito más de inglés.
Al final, lo han entendido y se morían de risa.... ¿La placa?.... je. El anciano la ha arrancado de la pared.... "Cuánto quiere?" le he preguntado.... "Nothing, i love people, i don´t love money".... he insistido una y otra vez, ni él ni ninguno de los miembros de la familia han aceptado nada, avergonzados por mi ofrecimiento, casi molestos.... al final les he pedido una Fanta Limón, preciosa por cierto, "Aquí tienen lo de la Fanta (X) y la propina (Xx20).... no han sabido reaccionar, solo reían.... el anciano no se ha enterado de que he dado ese dinero a la señora, sino hubiera montado en cólera.
2 comentarios:
Preciosa historia (aaaaaah beber esa fanta amarillo - traslúcida.... qué misterio)
vaya usted a saber
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