La verdad es que Stranger Things, un enorme y loquísimo tebeo hecho con mucha inteligencia, se está convirtiendo en una herramienta de marketing de primera división.
He visto la cuarta temporada. Lo dicho, un enorme y loco tebeo, rusos, pizzas, monstruos, chistes tontos, clichés de los de toda la vida, pero oigan, entretenida es un rato. Yo creo que por lo poco que se abusa de los elementos digitales y por esa contínua conexión con las cosas que nos resultan más del día al día, como bien hacía el maestro Spielberg, mucha analogía y los efectos cuando tocan..
Pero lo del marketing, es asombroso. Conocedoras de la gran repercusión que tiene esta serie sobre los nuevos públicos, las marcas se lanzan como bestias para estar "dentro" de alguno de los capítulos. Vans, Coca Cola, pero sobre todo la música.... Kiss, Ozzy Osbourne, Dio, y mucho hits de los 80. Pero la palma, en mi opinión, se la lleva Metallica. Meter, en el capítulo final, una escena en la que, para atraer a los bichos malos, uno de los grander personajes de la temporada, se tiene que subir a una casa contrachapada e interpretar Master of Puppets, madre mía, eso son mucho cientos de miles fans nuevos. Magistral. Creo que van a haber mucho nuevos heavymetalers en este año.
La temporada, pues eso, un tebeo la mar de entretenido.
2 comentarios:
No se si eres fan de la saga de Annabelle (the conjuring) (expediente Warren), pues también le hacen un guiño en esta serie.
En uno de los episodios, en la cama de la experta en ordenadores amiga de Dustin, aparece una muñeca de trapo que es igual que la Annabelle original, la que tienen o tenían los Warren en su cuarto de items malditos.
Abrazos
No me he dado cuenta de ese tema Guti, le echaré un vistazo, un abrazo Guti
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