Una de las piezas más interesantes y diferentes de la preciosa ciudad italiana de Bolonia es este altorrelieve dedicado al mismo Diablo que puede observarse en la Piazza de Santo Stefano. En dicho lugar vivía una de las familias más poderosas de la ciudad conocida por las tremendas desavenencias que existían entre sus miembros. El padre de familia ordenó esculpir efigies de todos los miembros del clan en la arcada del edificio, el escultor incluyó, entre ellas, la del propio Diablo, simbolizando que el Mal habitaba entre ellos.
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