¿Es posible encontrar un mono Schuco alemán de 1930 en Zaragoza en el rastro?. Lo es. Este pobre y maltrecho monito Schuco estaba entre miles de porquerías dentro de un puesto de un amable tipo. He regateado un poquito y me ha salido por un precio insultante. Adoro estos juguetes alemanes, sobre todo los de esta época, como los monitos, los cerditos y payasos saltimbanquis y músicos, una delicia. A este pobre músico le han dejado pocas cosas, ni tan siquiera brazos.
La empresa alemana originaria de Nuremberg, museo que visité hace unos años (Schreyer und Co, 1912) estaba especializada en juguetes de hojalata y posteriormente amplió su catálogo a vehículos, mundialmente conocidos por su calidad y elaboradísima manufactura. Yo no puedo permitirme coleccionarlos, pero está claro que son fascinantes. Adjunto una imagen de un mono que creo podría ser el que he conseguido pero listo para deleitarnos con una buena sonata de percusión.
2 comentarios:
Toca taller protésico creativo!
Soy incapaz de arreglar algo así, je.... abrazos
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