Una agradable sorpresa me deparaba el paseo del sábado por el centro de Barcelona. Sabíamos que el gran Juan Tamariz, uno de los mejores magos del mundo, estaba haciendo un espectáculo en la capital catalana, pero mientras estábamos en Pepe Jeans, olisqueando algo de ropa, cual fue mi sorpresa al ver que quien estaba pagando en la caja delante mía era el archigran Tamariz. Tras soltarle a la cajera una para de tachaaaaaaaaaaaans, tuvimos que pedirle que amablemente posara con nosotros y, pese a tener un poco de prisa, amablemente lo hizo. Sin sombrero de copa y sin mucha cabellera, pero ahí sigue el maestro de las cartas.
2 comentarios:
MA-RA-VI-LLO-SO ENCUENTRO.
MA-RA-VI-LLO-SO PERSONAJE.
jjejejejejeje, si, lástima no haber tenido una barajilla a mano, jejeje... lo mejor los chistes que le contaba a la encargada de la tienda, se moría de risa.... eso sí, los años pasan....
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