Me cuenta un buen amigo, mientras hablamos del último disco de Black Sabbath, la historia del problema en las manos de Tony Iommi. El guitarrista, pieza maestra de todas las bandas por las que se ha deslizado y uno de lo referentes de la historia del hard rock, perdió un dedo trabajando. Esto me comenta mi buen amigo: "La carrera de Tony como guitarrista estuvo a punto de terminar prematuramente cuando sufrió un accidente horrible en una fábrica de metal en
planchas y sus dedos se cortaron. Ésto le dio muchos problemas para
tocar la guitarra y la depresión, como era de esperar, fue horrible. Fue
entonces cuando un amigo le habló del guitarrista Django
Reinhardt, que perdió la movilidad de sus dedos en un incendio en el campamento gitano donde
vivía, pero que aun así siguió tocando. Esto inspiró a Iommi para
seguir con la guitarra, viéndose en su situación se fabricó él mismo, al
saber de metalurgia, una extensión metálica moldeada a sus dedos y
continuó, ya después unas pequeñas prótesis de goma para
sustituir las puntas de sus dedos amputados." Impresionante.
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