Zaragoza ha dicho adiós al General Sueiro, un profesor de la Academia General Militar de Zaragoza que se sublevó junto a Franco y participó en Belchite y la ofensiva a Cataluña hasta llegar a Francia.... lo sustituye un historiador navarro, catedrático de la Universidad de Zaragoza especializado en la Historia de Aragón y nuestros vecinos navarros.
Está bien sustituir militares por catedráticos, claro que sí.... pero nos acordaremos siempre de General Sueiro y de nuestro años en el número 40 de esta céntrica calle... nadie sabía qué había hecho este General, solo los socialistas del Ayuntamiento y estoy seguro que NADIE se ha preocupado en saber quién lo ha sustituido.... como dice Forges: "País!".
3 comentarios:
Personalmente pienso que no está demás cambiar según qué nombres. Pero teniendo claro:
a)Por qué se quita uno. Lo digo por que saltan de vez en cuando solicitudes a la luz pública que dan risa por que si no es para llorar, como por ejemplo en Andalucía, no recuerdo el sitio en concreto, pero quisieron quitar el nombre de "19 de Julio" por fascista, sin saber que hace referencia a Bailén, la primera batalla perdida por Napoleón en España. O el del cuartel Alfonso XIII, que también se ve que es muy fascista...
b) Sobre todo, sobre todo, cuidadín con los nombres que se ponen. Por que no me digas. Quedará muy pintoresco, pero lo de Valdespartera y el cine es que vamos... Manda cojones... O lo que se prevee de poner nombre de videojuegos...
Como dijo el sabio, en España no cabe un tonto más. Bueno... Siempre nos sorprenden y aparece alguno nuevo.
Otro ejemplo de ignorancia: Pocos saben que la calle Lagasca, de ilustre recuerdo agustiniano-niano, de Zaragoza está dedicada al botánico (aragonés) más importante de su tiempo.
Pueden darse tantos casos como capacidad tenga su blog de usted...
la verdad es ni se sabe quien se quita ni quien se pone... la gente, todos, no tenemos ni puñetera idea, salvo casos excepcionales de quienes son lo tipos que nombran nuestras calles... además es una pena...
yo me he mujdado hace poco y una de las primera cosas que hice fue investigar quien coño era Antonio Candalija, el tipo que da nombre a mi calle, resultó ser un ex-alcalde zaragozano bajo cuyo mandato se realizó la calle Alfonso, con la polémica pertinente... desde entonces le tengo más cariño a mi calle... conocer es querer...
Qué gran verdad, amigo Antonio...
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