Hay juguetes que, a mi entender lo tienen casi todo. Este es uno de ellos. Diseño exquisito, tema formidable y una forma de entender el mundo que ahora resulta inhóspita. Conocí este juego y le he dado muchas vueltas al circuito hace más de 40 años, me pareció maravilloso en su momento.
En los años 60 se puso de moda la gran carrera de Le Mans, entonces los coches eran muy bellos y muy imperfectos. Las carreras peligrosas y los pilotos románticos gladiadores. Este juego es una versión española de material francés, ilustrado por el gran Alain Grée. Grée es uno de los mejores ilustradores infantiles franceses de por entonces, todavía vivo a sus 84 años, atesora más de 300 obras. Su estilo, de mediados de siglo, lleno de frescura y texturas extraídas de sus pinceles y manos cuidadosas, intenta hoy en día replicarse por cuanto diseñador digital se precie, pero ni es Le Mans, ni es políticamente incorrecto, ni son aceitosas carreras de coches ni hay ilustración a mano. Seré un romántico pero no encuentro parangón a estos maestros de la ilustración de los 50-60.... originarios de centro Europa, y luego exportados a medio Mundo. Francia es un referente al respecto, sus automóviles también ayudaban.
Marcas maravillosas, nombres en las curvas, los preciosos e inolvidables coches, los billetes y la sencillez de correr en un tablero de cartón, junto con otros 4 colegas más que rodeaban la mesa. Yo el azul! Yo el rojo! No yo el blanco! Yo el verde!.... bueeeeno, me cojo el amarillo (que es el que nadie quería).
El folleto no son instrucciones, es un libreto que habla sobre carreras de coches, así en frío. Las instrucciones vienen en el dorso de la tapa.
Un regalo maravilloso que no olvidaré, gracias a mi querido hermano por su sensibilidad. ¿Echamos una carrera?
2 comentarios:
Maravilloso
Un día tenemos lamar a Guti, a PAco y a Arturo y echarnos una carrera.... el que pierda paga las cervezas....
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